TnM Solo quiero verte

Recuerdo la última vez  que sentía que mi alma tenía colores, pero ahora todo mi alrededor ce volvió gris, mi entorno, mis sentimientos, Todo. Recuerdo que cuando me mude de Danville todo cambio, perdí el contacto de mis amigos, de mis primos, mi familia, por el cambio de horario y la lejanía. Hasta casi no recuerdo su rostro, el rostro de él. Que me llenaba el día de sonrisas. Ahora todo lo que viví de niña solo son recuerdos gracias a la mudanza, perdí en la mudanza una caja donde estaba todo, todo lo importante para mí. Perdí las fotos de mis familias si lo pudiese llamar así.


Si no saben quién soy, mi nombre es Marie Elizabeth Flynn Garcia-Sharpiro tengo 16 años y vivo en París, Mis padres son el reconocido y gran inventor Phineas Flynn y la bella  Isabela Garcia-Sharpiro. Antes vivía en Danville cuando tenía 8 años tan llena de vida y alegre, siempre visitaba a mi medio primo Thomas fletcher que siempre me gustaba decirle Thommy, para hacer grandes inventos como hacia mi padre con mi tío de niños por el verano, solo que los míos terminaban explotándose. Pero después de un año nos mudamos de Danville para acá en París por el trabajo de mi padre, al principio no me gusto para nada. Pero al antes de irnos mi padre me dijo que solo sería unos 2 años o menos y eso me alegraba por el momento.


Llevo 8 años aquí en parís gracias a que todo iba muy bien, el trabajo de mi padre iba asegurando más la estadía. Nunca dije que no me gustaba parís, pero en Danville esta todo lo que me hace feliz. Nunca les dije a mis padres que quería volver, porque sabía que ellos se sentían muy bien aquí no les quería quitar eso.


Hoy es Domingo, no hay clases y eso me alegraba un poco. Pero de igual forma era otro domingo sin amigos. Tengo amigos aquí, llevo 8 años en esta ciudad ¿pensaban que no tenía? Su nombre es Giana pero yo le digo Any por cariño y también una pequeña niña de 8 años llamada Sofía. Any ella es una amiga pero no es mi mejor amiga, solo pasamos tiempo cuando salimos de clases y a veces viene a mi casa hacer tarea, pero igual que este a mi lado me siento sola. Siempre ella va los domingos a casa de sus abuelos en Barcelona. Y Sofía la visito muy poco ya que está en un hospital. Yo abecés voy al parque y me siento a recordar los momentos que pasaba con mi amiga jazz en Danville siempre comíamos un helado yo pedía de chocolate y ella de fresa.


Hoy me pare temprano mínimo a las 6:30 am, me di una ducha tranquilamente y fui a bajo a buscar un libro para leer. Cuando baje eran ya las 7:15 am hora que mi dulce madre se despertaba los domingos para hacer el desayuno.

Isabela- Buenos días hija.- dijo mi madre bajando las escaleras.

Marie- Buenos días mama.- Le respondí sentada en el sofá leyendo mi libro.

Isabela- Hoy preparare unos huevos con tocino ¿te gustaría?

Marie- Esta bien.- Dije sin muchas ganas, porque recordé que ese era el desayuno favorito de thom.

Phineas- ¿Cómo durmió mi girasol?.- dijo muy feliz mi padre yendo a la cocina.

Marie- Súper.- Le respondí fingiendo estar alegre y sin quitar la mirada de mí libro.

Phineas- Oye Izzy que le pasa a Marie la veo algo triste.- dijo susurrándole a Isabela en la cocina.

Isabela- Recuerda que ella después de 2 años aquí, le empezó a molestar la mudanza.- dijo algo triste por Marie.

Phineas- Yo no pensé quedarnos mucho tiempo, pero como todo va bien en mi trabajo… No ce que decirte.

Isabela- Yo tengo una solución a eso, pero ay que hablar lo cuando no este.- Dijo terminando de hacer el desayuno.


Yo estaba a por la mitad de mi lectura pero me llamo mi madre para ir a comer. Eso sí era algo habitual que nunca cambiábamos por nada, sentarnos los 3 a desayunar y también para cenar. Me gustaba pero cuando terminaba siempre se iba mi padre al trabajo, ese trabajo que me hizo mudar, siempre lo deteste.

Isabela- Ten hija.- poniendo el plato frente de ella y después sentándose en otro lado de la mesa.

Phineas- Y dime ¿Qué piensas hacer hoy?.- me pregunto mi padre muy feliz.

Marie- Creo que lo mismo de cada domingo, irme al parque a tomar aire fresco y después ir a comer un helado.- dije fingiendo una sonrisa.

Isabela- Y ¿no prefieres ir con migo a visitar a Sofí?.- me dijo con una sonrisa, sabiendo porque estaba triste.


Mi madre se refería a ir al hospital, para visitar a una niña muy alegre y dulce que está pasando por cáncer. Eso a mí me duele porque ya la he ido a visitar y se parece mucho a mi cuando tenía 8 años. Alegre, Gentil y muy amable, además siempre tiene a pesar de su enfermedad una gran sonrisa de felicidad en su rostro.

Marie- Me encantaría, me parece mejor que andar sola en el parque.- dije un poco feliz.

Isabela- Que bien, limpiare esto con tu ayuda y nos vamos.- Dijo contenta al verme sonreír.

Phineas-Bueno ya ce me hace tarde. Nos vemos luego mis 2 hermosas señoritas.

Marie- Adiós papa, que te vaya bien.

Isabela- Adiós cariño, cuídate.- dándole un beso de despedida.

Marie- Siempre odie ese trabajo.- dije molesta cuando salió mi padre de la casa.

Isabela- Lose hija, pero yo te prometo que………..

Marie- Ya me hiso el esa promesa y nunca la cumplió.- Dije muy triste.- Y seguro la tuya tampoco será real.

Isabela- Bueno hija, a veces uno no sabe qué va a pasar en el futuro.- dijo alentándome mi madre.

Marie- Mama mejor terminemos de limpiar los trastes y nos vamos al hospital.- le comente un poco desanimada.


Después de terminar nos subimos a el auto de mi madre destino al hospital. Cuando llegamos mi madre se quedó hablando con la doctora que estaba en el lobby, y yo fui directo al cuarto de sofí.

Marie- Toc Toc Toc. ¿Puedo pasar?.- dije mientras abría poco a poco la puerta
Cuando ella me vio el rostro se alegró demasiado, se le puso una sonrisa muy grande en su rostro, tal como era la mía de cuando era niña.

Sofía- ¡Pasa, pasa!.- me contesto emocionada.

Marie- ¿Cómo estas linda?.- le pregunte con una sonrisa pequeña en mi rostro.

Sofía- ¡Muy bien ahora que estas con migo Marie!

Marie- Me alegra oír eso.- comente sentándome al lado de su cama.


Esa pequeña me alegraba el día cuando la visitaba. Siempre le podía contar mis inquietudes y ella las suyas a mí. Pero no podía visitarla mucho, ya que algunos domingos estoy deprimida y no quiero que ella me vea así.

Sofía- Oye Marie, ¿será que hoy si pudiera salir contigo al parque?

Isabela- Ya me encargue de eso.- dijo mi madre entrando a la habitación.

Marie- ¿!Cómo¡?.- pregunte sorprendida.

Isabela- Hable con la doctora a ver si sofí estaba en condiciones de salir un rato al parque contigo, y  me dio permiso para que la llevaras. ¡Claro si sofí aceptad¡

Sofía- ¡Claro que sí!.- dijo la pequeña abrasándome fuerte pero dulcemente.

Marie- entonces iremos.- dándole una sonrisa.
La niña salto de su cama para alistarse, estaba emocionada y eso me daba un poco de felicidad.


Salimos las dos del hospital, ella más ansiosa por ver el parque, comer un helado y recolectar flores con migo.


Cuando llegamos su rostro no lo podía imaginar. Ya que ella desde ya hace unos 10 meses no pudo salir de ese hospital y poder sentir el pasto fresco y las aves cantar. De repente de su rostro salió unas lágrimas de felicidad, me abrazo como gesto de agradecimiento por traerla.

Sofía- ¡MUCHAS GRACIAS MARIE!.- Me dijo soltando sus lágrimas

Marie- De nada mi pequeña amiga.- Le dije con una sonrisa por ver esa hermosa escena de cariño, como si fuéramos hermanas…




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